Se aproximan los meses lluviosos a nuestra ciudad y  en  Caribe Motor queremos advertirte sobre  los errores de conducción que debes evitar para manejar tu vehículo de forma segura y estar protegido en esta época:

Conducir hacia los lados de la carretera: esto es debido a que a estas las construyen para que sean más altas en el centro con el fin de que el agua se escurra y  drene en los borde, por ello te aconsejamos que conduzcas por el carril del centro, aunque este no esté bien seco, sobre todo si sigue lloviendo, pero va a ser el lugar más seco de todos.

Conducir con las luces apagadas: además de que estarías infringiendo la ley sería peligroso, pues los faros nos ayudan a ver lo que está delante de nosotros. En realidad, cuando está lloviendo necesitas las luces delanteras incluso durante el día para que los otros conductores te puedan ver. Además de esto, evita usar las luces altas para no encandilar  a los demás.

No conduzcas si la visibilidad es baja: No importa si conoces tan bien el camino que podrías conducir con los ojos vendados, no debes conducir mientras haya demasiada agua en el parabrisas. Es mejor salir de la carretera tan pronto como sea posible y esperar.

Tu auto no es un bote: Si ves agua que fluye a través de la carretera de un lado a otro y no sabes cuan profundo es el “río”, no trates de cruzarlo. Cada año, los conductores desafortunados entienden que su vehículo no será perjudicado por un charco de agua pero se encuentran que era más profundo de lo esperado. Luego se encuentran arrastrados y buscando desesperadamente escapar.

No bajar la velocidad: Los límites de velocidad existen para decirte que tan seguro es conducir en buenas condiciones, pero cuando están mojadas te recomendamos conducir por debajo de lo indicado.

El peor de los peligros de conducir demasiado rápido en la lluvia es el “aquaplaning”. Es lo que sucede cuando el camino está mojado y vas demasiado rápido, tu vehículo puede empezar a flotar en la superficie del agua y la banda de rodadura del neumático pierde el contacto con la superficie de la carretera. Cuando la banda de rodamiento pierde el contacto con la superficie del camino, ya no se puede dirigir. Esto es lo que sucede con el aquaplaning.

¿Qué pasa si no lo puedes evitar? No pises el freno porque eso sólo empeora las cosas. Suelta el acelerador para que cualquier tracción restante pueda disminuir tu velocidad. Y sigue recto. No trates de girar. Si el coche está virando en una dirección a la que no quieres ir, no luches contra eso, sólo tienes que seguir tus ruedas. Y cuando el vehículo frene de repente volverás a tener el control.

Tomado de motor.uncomo.com